Venezuela le ganó 2-0 a Bolivia en el estadio Monumental de Maturín, se llevó tres puntos de oro para afirmarse en puesto de repechaje en las Eliminatorias Sudamericanas, y tendrá por delante tres compromisos cruciales para soñar con el boleto directo al Mundial 2026.
La trascendencia del duelo en el estado de Monagas obligaba a jugar una partida de ajedrez, ya que un error se podía pagar caro. Y el visitante lo experimentó en carne propia con un insólito blooper en medio de una salida defensiva a los cuatro minutos.
Luis Haquín le cedió un pase a su compañero en la zaga, Efraín Morales, quien le repartió la posesión a Héctor Cuellar. El mediocampista central tenía la opción de salir para su derecha, ya que no era presionado por nadie, pero eligió mandarle la pelota con mucha potencia a su arquero, Guillermo Viscarra. El guardameta subestimó el control, el balón se le fue por abajo del pie y, sin tiempo de reacción, entró en su arco.
Este inesperado golpe dejó nocaut a la visita, que asomó en el área ajena a cuentagotas sin poder finalizar sus ataques frente al guardameta Rafael Romo y, lentamente, el dominio del local comenzó a ser pronunciado con el apoyo del público en las tribunas.
Salomón Rondón y Jefferson Savarino tuvieron sus ocasiones para ampliar la ventaja a través de intentos seguidos de buenas tapadas de Viscarra, pero el centrodelantero tuvo revancha y no perdonó. Rondón luchó contra Haquín, se fabricó el espacio y sacó un potente zurdazo en el rectángulo mayor para el 2-0 del dueño de casa a los 29 minutos.
Venezuela mantuvo el control de las acciones en la última parte del primer acto y, de regreso del entretiempo, nada cambió debido a que siguió teniendo las jugadas más claras. Pudo transformar el trámite en una goleada, pero Viscarra le negó el festejo a Josef Martínez, mientras que Jon Aramburu ejecutó un derechazo dentro del área que se perdió al lado del palo derecho del arquero de Bolivia.
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