La dieta mediterránea se convirtió en la base de una alimentación saludable. Es por esto que, debido a que tiene una sólida base científica y que es práctico aplicarla, los expertos la recomiendan.
En este sentido, las especialistas en Endocrinología y Nutrición de la Clínica Universidad de Navarra, Marta Motilla y Sonsoles Guadalix, afirman que en los últimos años hubo un incremento en el consumo de legumbres de 2 a 4 veces por semana y aconsejan priorizar el pescado azul por sus múltiples beneficios.
Al mismo tiempo, afirman que mantener una alimentación saludable es “clave” para envejecer bien y prevenir enfermedades cardiovasculares, el cáncer, la obesidad o la diabetes. Por eso recomiendan consumir más carnes blancas en lugar de rojas, limitar la ingesta de carnes procesadas, como el jamón, salchicha o la carne seca y utilizar el aceite de oliva virgen extra, en cantidades de entre 10 y 20 mililitros al día por persona, para usar en la cocina.
Qué es la dieta mediterránea y cuáles son los beneficios
La dieta mediterránea esta basada en el consumo elevado de frutas, verduras, legumbres y cereales, en donde se incluye el pescado, el aceite de oliva como fuente principal de grasa para cocinar, semillas, alimentos ricos en vitaminas y antioxidantes.
De esta manera, tiene abundantes propiedades y características que hace de esta forma de alimentarse una de las más variadas, equilibradas y completas del mundo. Entre sus beneficios se encuentra:
- Aporta vitaminas y minerales, de ácidos grasos monoinsaturados, el contenido en hidratos de carbono complejos y el alto contenido en fibra
- Es sabrosa por su variedad y por las formas de preparación en la cocina.
- Es económica, ya que gran parte de los alimentos que la forman no tiene un precio elevado: legumbres, cereales y sobre todo productos de temporada que hace que tengan mejor precio que otros que no lo son.
- Puede llevar a niveles de azúcar más estables, colesterol y triglicéridos más bajos y un riesgo menor de desarrollar enfermedades cardíacas y otros problemas de salud}
La importancia de comprar bien en el supermercado
“Una adecuada alimentación comienza en el supermercado. Elegir bien los productos es el primer paso para seguir una dieta mediterránea: optar por alimentos frescos, de temporada y poco procesados marca la diferencia”, destacaron las doctoras Motilla y Guadalix.
De esta forma, para una familia tipo compuesta por dos padres y dos hijos, las especialistas proponen un cambio en las cantidades habituales de la compra: primero recomiendan aumentar la cantidad de fruta y verdura de unos 4-6 kg a 8-11 kg semanales, lo que garantiza “un alto aporte de fibra, vitaminas y antioxidantes”. Asimismo, conviene aumentar el consumo semanal de alimentos proteicos: huevos (de 4-8 unidades a 10-16), legumbres (de 500 gramos a 800), pescado (de 1 kg a 1,5) y carnes, (de 1 kg a 1,5).
En cuanto los lácteos, para los adultos recomiendan dos o tres raciones y para niños o adolescentes de 2 a cuatro. Además, aconsejan aumentar la compra de yogures de 12-24 unidades a 40 unidades, y de queso blanco de 200 a 320 gramos. Esto mantiene un consumo de unos 6 litros de leche a la semana, aproximadamente.
Por el lado de la la ingesta de harinas, las doctoras Motilla y Guadalix proponen optar por el formato integral tanto en cereales, como en pan, pasta o arroz, “porque es una forma sencilla de cuidar la salud durante todo el año, ya que ayudan a regular el azúcar en sangre y mejoran el tránsito intestinal contribuyendo a prevenir enfermedades como la diabetes tipo 2, problemas cardiovasculares o el cáncer de colon”.
Esta propuesta de compra semanal “pone en práctica los principios del plato mediterráneo: variedad, equilibrio, sencillez y evidencia científica y puede mejorar la salud de toda la familia”.
Fuente: Ambito