El elegido: Javier Frana se convirtió en el nuevo capitán del equipo argentino de la Copa Davis. La Asociación Argentina de Tenis anunció al rafaelino de 57 años, la opción principal en sus papeles, para reemplazar a Guillermo Coria, quien permaneció tres años en el cargo.
Doblista de gran categoría, fue medallista de bronce por duplas en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, finalista de Wimbledon en 1991 y de Roland Garros mixto en 1996, y hombre de fuerte vínculo con la ensaladera -20 series entre 1986 y 1997-, será presentado este viernes de manera oficial y tendrá su debut en la silla ante Noruega, de visitante, por la primera ronda de los Qualifiers, una instancia que estará constituida por 26 equipos enfrentados en trece cruces mano a mano y al mejor de cinco puntos.
La serie será en una de las fechas que deberá elegir el país anfitrión, al igual que el estadio y la superficie: del 31 de enero al 1° de febrero o bien del 1° de febrero al 2 del mismo mes. Los ganadores sacarán pasaje directo para la segunda ronda, una nueva instancia de septiembre, también con duelos mano a mano, que reemplazará la fase de grupos. En caso de triunfar, Argentina volverá a jugar de visitante: espera Países Bajos, el finalista de este año -perdió con Italia-, que saldrá adelantado en el debut.
“Me siento súper honrado y agradecido de que me hayan tenido en cuenta para esta función tan especial. Lo que uno espera, además de resultados, es acompañar a los chicos y ayudarlos a llevar esta carrera y a vivir estos desafíos como algo estimulante y lejos del dramatismo; para que vivan como una cuestión de honor y de orgullo defender los colores patrios”, fueron las primeras palabras de Frana, el capitán número 32 de toda la historia de la Argentina en la Davis.
Habló, con contundencia, con un claro mensaje para la nueva etapa: “Hacerles entender a los jugadores que se los necesita a todos”. Acaso pueda leerse como una frase para acercar partes con Horacio Zeballos, el doblista más destacado de la historia de la Argentina, número uno del mundo hasta dos semanas atrás y actual 4° del ranking por duplas, enfrentado con Coria luego de haber sido marginado de los Juegos Olímpicos de París 2024 pese haberse convertido el mejor del planeta en su modalidad. En principio, consumada la salida del Mago, el marplatense de 39 años estaría disponible para volver al equipo.
También surge un reto mayúsculo en el corto plazo para Frana: persuadir a los mejores jugadores para viajar al invierno de Europa, inmediatamente después del extremo calor de Australia y días antes del verano sudamericano, cuya gira será en febrero y en superficie lenta. “Creo que en Copa Davis no hay series más fáciles que otras. Puede haber una serie que sea más cómoda, por logística, dependiendo de dónde vienen los jugadores o a dónde tienen que ir. En el sorteo tocó Noruega y habrá que empezar a poner la cabeza en esa situación para tratar de anticipar lo mejor que se pueda todo lo que se va a vivir en esos días”, expresó el flamante capitán.
Para asumir el nuevo desafío Frana debió desvincularse de su último trabajo, el que había representado su vuelta a la escena principal del tenis luego de su salida, años atrás, como comentarista de tenis en ESPN: hasta esta semana fue asesor técnico en el equipo de la academia de Sebastián Gutiérrez, el entrenador argentino del año, coach del número uno nacional Sebastián Báez y de otros jugadores de gran presente como Francisco Comesaña y Solana Sierra.
La Davis representa un profundo enlace emocional para Frana, 30° del mundo en singles en 1995 y ganador de tres títulos de ATP -en dobles fue 14° y conquistó siete trofeos-. Para graficar su etapa copera alcanza con mencionar que es el quinto tenista argentino con mayor cantidad de series en toda la historia, sólo superado por Guillermo Vilas (29), David Nalbandian (26), Ricardo Cano (23) y José Luis Clerc (22).
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