El gremio de Camioneros no logra cerrar la paritaria salarial. No solo por la falta de acuerdo con la rama empresaria sino porque, como denunció el propio Hugo Moyano, el gobierno de Javier Milei impide que se acuerde por arriba de la pauta del 3 por ciento trimestral. Así fue que, tras un nueva audiencia sin éxito, Moyano convocó a una asamblea de la Federación Nacional de Trabajadores Camioneros que a su término se declaró en estado de alerta y movilización. La propuesta del veterano líder es simple, si hasta el próximo miércoles no hay acuerdo para el trimestre diciembre-febrero “vamos al paro nacional compañeros”.
El gremio de Moyano reclama un 15 por ciento trimestral divido en tres cuotas de 5 por ciento, más un bono de $650.000 y un aporte extraordinario para la obra social. La propuesta no es del agrado de los patrones y volvieron a rechazarla. Con esa negativa entre las manos se reunió la asamblea de camioneros que mandató a Moyano a definir las medidas de fuerza en caso de que el próximo encuentro fracase nuevamente.
Durante la asamblea, Moyano señaló al gobierno nacional como uno de los responsables de que la negociación no llegue a buen puerto. Es por eso que el camionero la empredió contra la Casa Rosada al afirmar que “si creen que se ha hecho algo malo, hay un solo responsable y ese soy yo, señor Presidente. Yo no me voy del país, me quedo acá. Si me quieren venir a buscar que vengan”, dijo Moyano. Tras destacar el rol que tienen los trabajadores camioneros en la sociedad dijo que esta discusión con las cámaras empresarias tiene un solo objetivo, “el de tener un salario como corresponde”, afirmó.
Uno de los referentes de la federación, Jorge Taboada, fue más enfático a la hora de cuestionar el rol del Gobierno en la negociación salarial: “¿Qué carajo hace entrometiéndose en una discusión paritaria entre dos sectores privados como las cámaras empresarias y el sector sindical? Son cosas que no se entienden. ¿Entonces para qué nos citan o para qué discutimos el paritaria? ¿Por qué no dicen el 1 por ciento por decreto y buenas tardes, mucho gusto”, dijo ante la asamblea de la Federación.
Taboada afirmó además que es preciso que “el sector empresario recapacite y mejore la propuesta para no llegar a una medida de fuerza. La pelotita la tienen ellos y el Gobierno”.
La referencia al gobierno no es gratuita. De hecho la reaparición de Moyano padre en la CGT fue para afianzar el perfil dialoguista de la central obrera que terminó por desplazar a su hijo Pablo del triunvirato y designó designó a Octavio Argüello. Es ante esta movida que en la federación de Camioneros esperan una actitud de la Secretaría de Trabajo en línea con esta posición. Y para eso le reclaman que favorezca un acuerdo que mejore la situación de los camioneros y no que le ponga tope a la pauta salarial. No está claro si el titular de la cartera laboral, Julio Cordero, tiene margen para tomar decisiones de este tipo.
Por ahora la poderosa Federación se encuentra en estado de “alerta y movilización” hasta el próximo miércoles. Si no hay fumata blanca, es posible que haya paro durante las fiestas de fin de año.
Bancarios
Los que ya dieron las hurras son los trabajadores de la Asociación Bancaria que confirmó un ajuste salarial para sus afiliados, siguiendo el último dato de la inflación y con un compromiso de mantener el poder adquisitivo de sus representados. El aumento, que se hace en función de los índices de precios al consumidor de noviembre de 2024, se sumará a los sueldos de diciembre y será abonado en enero de 2025. Así, el salario inicial de un trabajador bancario, incluyendo participación por Ganancias, superará los $1.600.000.
Este incremento, que asciende al 2,4% sobre los salarios de octubre, refleja la evolución del costo de vida y asegura que los empleados no pierdan frente a la inflación. La paritaria acordada, que acumula un 112% en lo que va del año, incluye tanto remuneraciones normales como adicionales, convencionales y no convencionales.