El juez federal de Campana, Adrián González Charvay, le tomó declaración indagatoria a David Nazareno Ávila, el delivery de General Roca, Río Negro, sospechado de intentar emprender una acción terrorista y que fue detenido el martes por sus posibles vínculos con el Estado Islámico y por realizar actividades de difusión y propaganda yihadista a través de redes sociales.
En su declaración, el imputado brindó las explicaciones que estimó pertinentes para su defensa y respondió las preguntas del juez y de la fiscalía. El hombre, que fue voluntario en el Ejército durante cuatro meses en San Martín de los Andes y dado de baja por padecer problemas mentales, había indicado que se convirtió al Islam, pero que no iba a cometer ningún atentado. Dijo que intentaba sacarle dinero a otros participantes de un chat de fundamentalistas con el argumento de financiar un ataque contra “el gobierno sionista”.
Ávila fue aprehendido el 9 de enero y, según la versión del Ministerio de Seguridad dirigido por Patricia Bullrich, planeaba atentados de gran magnitud en el país bajo la modalidad de “lobo solitario”. Se supo que trabajaba en un local de mensajería de General Roca, lo que para la ministra libertaria indica que “no es casual” porque “esa mensajería le permitía moverse para elegir blancos”.
“Es un terrorista vinculado a Daesh, a Estado Islámico. ´Naza´, como se hacía llamar en las redes, representaba una amenaza concreta contra la seguridad de los argentinos. Frustramos sus planes antes de que pudieran causar daño”, dijo Bullrich en medio de un show mediático. La aprehensión se dio en el marco de una investigación desarrollada por la Fiscalía Federal de Campana y la Unidad Fiscal Especializada en Criminalidad Organizada.
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