La medida fue autorizada por el juez De Moraes, luego de una solicitud de la policía federal. Así, no será necesario un permiso de la Corte Suprema de Brasil.

El juez del Supremo Tribunal Federal de Brasil Alexandre de Moraes flexibilizó la condición de arresto domiciliario impuesta al expresidente Jair Bolsonaro. Así, permitirá que sus familiares lo visiten sin autorización previa.
La autorización de De Moraes siguió a una solicitud de la policía federal y significa que los familiares podrán visitar la residencia donde Bolsonaro vive con su esposa, Michelle, sin tener que pedir permiso al tribunal primero.
La medida se aplica a los hijos e hija de Bolsonaro, nietos y familiares cercanos de su esposa. El exlíder conservador está siendo juzgado por un presunto golpe de Estado tras su derrota electoral ante el actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva. Bolsonaro niega haber cometido algún delito.
La Justicia brasileña flexibilizó el arresto domiciliario de Jair Bolsonaro
La orden de arresto domiciliario dividió a los brasileños y captó la atención de EEUU, con quien enfrenta una guerra comercial.
El presidente Donald Trump calificó la acusación contra Bolsonaro como una caza de brujas y terminó imponiendo un arancel del 50% a los productos brasileños importados.
La orden original de arresto domiciliario emitida el lunes permitía solo a los abogados de Bolsonaro tener acceso ilimitado a su residencia.
El tribunal el mes pasado había ordenado a Bolsonaro usar una tobillera electrónica y obedecer un toque de queda mientras se llevan a cabo los procedimientos.
EEUU consideró que la prisión domiciliaria a Jair Bolsonaro “amenaza la democracia”
El Departamento de Estado de EEUU criticó la decisión del juez Alexandre de Moraes, miembro del Supremo Tribunal Federal de Brasil, de imponer prisión domiciliaria al expresidente Jair Bolsonaro. Según un comunicado oficial, la medida “amenaza la democracia” y restringe el derecho del exmandatario a expresarse públicamente.
A través de su Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental, el ente estadounidense expresó: “El ministro Alexandre de Moraes, ya sancionado por los EEUU por violaciones de derechos humanos, continúa usando las instituciones brasileñas para silenciar a la oposición y amenazar la democracia”.
En esa línea, completó que “imponer aún más restricciones a la capacidad de Jair Bolsonaro de defenderse públicamente no es un servicio público. ¡Dejen a Bolsonaro hablar!”.
Fuente: Ambito