El base Tyrese Haliburton se operó de la rotura del tendón de Aquiles de su pierna derecha que sufrió en el séptimo partido de las Finales de la NBA, que terminó con derrota para sus Indiana Pacers, y se refirió por primera vez al tema en un mensaje publicado en sus redes sociales.
“No sé cómo explicarlo más que con una palabra: shock. No hay palabras para expresar el dolor de esta decepción. La frustración es inconmensurable. He trabajado toda mi vida para llegar a este momento, ¿y así termina todo? No tiene sentido”, inició el joven base.
“Siento el pie como si fuera un peso muerto. Pero creo que lo que más me duele es la mente (…). Con 25 años, ya he aprendido que Dios nunca nos da más de lo que podemos soportar. Sé que voy a salir de esto siendo un mejor hombre y un mejor jugador. Y honestamente, ahora mismo con el tendón de Aquiles roto y todo, no me arrepiento. Lo haría otra vez, y otra vez después de eso, por luchar por esta ciudad y por mis hermanos. Por la oportunidad de lograr algo especial”, agregó en referencia a que no llegó en las mejores condiciones físicas a los últimos partidos.
Haliburton venía lidiando con una molestia en el gemelo de la pierna derecha pero arrancó de gran manera el séptimo y definitorio juego, con tres triples en siete minutos antes de sufrir la lesión que lo dejó tendido en el piso, llorando desconsoladamente.
“Pero juntos vamos a pelear con todo para volver -continúa la carta- a este mismo lugar y superar este obstáculo (…). Creo que Kobe Bryant lo dijo mejor cuando pasó por lo mismo: ‘Hay problemas y desafíos mucho más grandes en el mundo que un tendón de Aquiles roto. Deja de sentir lástima por ti mismo, encuentra el lado positivo y ponete a trabajar con la misma fe, la misma energía y la misma convicción de siempre’. Y tiene toda la razón. Voy a hacer todo lo que esté en mis manos para volver bien”.
“Lo más importante de todo esto es que estoy agradecido. Agradecido por cada experiencia que me trajo hasta aquí. Agradecido por todo el amor del mundo del básquet (…). Ya van a ver cómo vuelvo de esto. Así que, denme un poco de tiempo: me voy a sacudir el polvo y volver a ser la mejor versión de Tyrese Haliburton”, cerró.
Tras la salida del base y a pesar de una digna actuación de los Pacers, el Oklahoma City Thunder se impuso por 103-91 en el partido del domingo por la noche y se coronó campeón por primera vez en la historia de la ciudad.