El exdiputado nacional Omar de Marchi, quien lleva menos de diez días como vicepresidente de Aerolíneas Argentinas y es uno de los principales impulsores de la privatización de la compañía, compró un pasaje por el 10 por ciento del valor de la categoría turista y se tomó un fin de semana XXL en la provincia de Mendoza.
La jugada de De Marchi quedó al descubierto luego de que circulara por redes sociales una captura de pantalla del sistema interno de la compañía en la que se mostraba que el mendocino había solicitado pasajes con el beneficio “sublo”, exclusivo para los empleados. Es decir, abona solo las tasas aeroportuarias, aunque está sujeto a espacio. Sería algo así como un 10 por ciento del valor total del boleto. De acuerdo a la información difundida, De Marchi abonó $25.433 por un vuelo ida y vuelta desde Aeroparque a Mendoza. La salida fue el jueves 7 del mes en curso y el regreso está fijado para el martes próximo.
Las primeras versiones indicaban que el dirigente viajó en primera clase, pero él desmintió lo de business, pero no así el descuento. “Es una mentira, lo único que hice fue viajar a Mendoza en la parte de atrás del avión, no en business. No se puede creer que mientan así, me quieren hacer una cama”, respondió De Marchi a La Nación, en un intento de defensa.
De Marchi, referente del PRO que saltó a las filas de La Libertad Avanza, llegó como vicepresidente de la compañía con el objetivo de encaminar el proceso de privatización. Fue nombrado por el titular de la línea aérea, Fabián Lombardo. “Confiamos en que la incorporación del doctor De Marchi ayude en el proceso de transformación profunda que está atravesando Aerolíneas Argentinas”, expresó Lombardo, para darle la bienvenida, la semana pasada.
El excandidato a gobernador de Mendoza se desempeñaba como secretario de Relaciones Parlamentarias, pero tras un fracasado rol como negociador por la Ley Bases, ahora tendrá como objetivo encarar las negociaciones con empresas y sindicatos en una posible venta de la aerolínea de bandera.
De momento, los trolls que suelen criticar en las redes a los empleados de aerolíneas por tener pasajes gratuitos o pagar sus asientos a un 10 por ciento del valor, no se pronunciaron sobre la jugada de De Marchi. Si bien son cuestiones que existen en cualquier aerolínea, los libertarios lo consideran un beneficio de la casta. Pero cuando les toca a ellos, no hay ninguna oposición, al parecer.