“El Estado y no el mercado es el que gesta la armonía y garantiza la justicia social”. La frase forma parte de una carta que el Papa Francisco envió a los jueces uruguayos con motivo del lanzamiento del capítulo Uruguay del Comité Panamericano de Juezas y Jueces por los Derechos Sociales y la Doctrina Franciscana (COPAJU), una organización con respaldo vaticano y que a nivel panamericano preside el magistrado argentino Roberto Andrés Gallardo.
“En esos tiempos de tantas asimetrías en donde un puñado de personas y corporaciones concentran la mayor parte de la riqueza mundial y millones son descartados, es fundamental entender las cosas con claridad”, dice el Papa. Y a renglón seguido, Francisco les señala a los magistrados uruguayos que “no proponen un nueva historia quienes hablan de una supuesta armonía proveniente del mercado”. Es allí donde Francisco asegura que “la historia es vieja y los resultados nunca fueron buenos. El Estado y no el mercado es el que gesta la armonía y garantiza la justicia social”.
Un mensaje de tono similar había expresado Jorge Bergoglio en febrero de este año en un video entonces dirigido a los jueces argentinos en el momento de la inauguración en Buenos Aires de la sede de COPAJU. “El Estado, hoy más importante que nunca, está llamado a ejercer un papel central de redistribución y justicia social”, dijo Francisco en aquella oportunidad.
“Para que no haya más descartados y todos formen parte del sistema económico y social en forma igualitaria e integrada debe concretarse una distribución de riqueza equitativa y justa”, sostiene ahora el Papa. En su argumentación, el pontífice señaló que “no hay sociedades que progresen sobre la pobreza de sus integrantes” o, en todo caso, dijo, “progresarán algunos en forma individual, pero cabe preguntarse: ¿Qué tipo de progreso es ese?, ¿Puede tener un buen futuro una persona inserta en una sociedad desigual y expulsiva?’”.
COPAJU –creado en 2019– es un espacio que reúne a magistradas y magistrados de todo el continente americano convocados por las ideas del Papa, quien viene insistiendo en el papel de los operadores judiciales en la construcción de una sociedad más justa y una vida más digna. El acto de lanzamiento del Capítulo Uruguay se realizó en la Facultad de Derecho de la Universidad de la República (UDELAR). La carta del Papa fue leída allí por el juez argentino Roberto Andrés Gallardo, en su calidad de presidente a nivel panamericano. También estuvo presente Raúl Zaffaroni, uno de los directores del Instituto Fray Bartolomé de las Casas (IFBC), rama académica de COPAJU, que también fue presentado en suelo uruguayo. En breve se producirá también la apertura de la sede del IFBC en Brasilia, en un espacio cedido por la Universidad Católica de ese estado brasileño.
Al hacer uso de la palabra, Gallardo aclaró que “COPAJU no es una organización religiosa” sino “una apuesta a la dignidad humana que sigue la mira holística de Francisco”, en referencia a que tanto la crisis social, como la humanitaria y la ecológica son “una sola crisis”. Gallardo señaló también que “hoy vivimos las consecuencias de haber seguido por el camino del híperconsumismo, el individualismo, la desintegración social” y que, en ese escenario, la mirada general del Papa, junto a un diagnóstico acertado, aporta ideas y sugiere alternativas.
En su carta a los jueces uruguayos, Francisco les pidió que “tengan valor” y se unan. Les recomendó además que “confíen en la senda de Artigas y nunca olviden aquella canción hermosa de Alfredo Zitarrosa, para que la ley no sea una tela de araña que sólo atrapa a los chiquitos y deja indemnes a los poderosos que la atraviesan sin dificultad”. Por último, les dijo: “no ayuden a ‘limpiar las calles de pobres’, ayuden a que no haya pobreza. Hagan realidad los derechos básicos de todas y todos. Comprométanse”.
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