El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires anunció este lunes que sancionará a quienes revuelvan los contenedores de basura y ensucien la vía pública con quince días de trabajos de utilidad pública o multas de entre $59.260 y $890.544.
Según las autoridades, esta medida apunta a evitar actos vandálicos, aunque en redes sociales hay vecinos que consideraron que se trata de un nuevo embate hacia las personas en situación de calle y los recuperadores urbanos, que en el pasado fueron fueron considerados por el Gobierno porteño como elementos que “alteran” la “imagen de Ciudad Limpia”.
“Di la orden al Ministerio de Seguridad y a la Policía de la Ciudad que, si encuentran a alguna persona o grupo de personas removiendo basura de los contenedores y ensuciando nuestra ciudad, les exijan que limpien y ordenen todo de inmediato. Si se niegan, que los sancionen según la normativa vigente”, explicó el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, en sus redes sociales.
En la publicación, recordó que el artículo 94 del Código Contravencional de la Ciudad prevé que: “Quien mancha o ensucia por cualquier medio bienes de propiedad pública o privada, es sancionado/a con uno a quince días de trabajos de utilidad pública o 81 a 1.217 unidades fijas de multa”, lo que al valor actual representa montos de entre $59.260 y $890.544.
“La sanción se eleva al doble cuando la acción se realiza desde un vehículo motorizado o cuando se efectúa sobre estatuas, monumentos, templos religiosos, establecimientos educativos y hospitalarios, edificios o lugares públicos, estaciones y vagones de subterráneos o de trenes”, añade la norma.
En caso de que se trate de bienes de propiedad privada, aclara el Código Contravencional porteño, “la acción es dependiente de instancia privada, excepto en el caso de templos religiosos”.
Contenedores de basura en CABA
En la Ciudad de Buenos Aires hay 33.045 contenedores: 28.456 son negros y grises, y 4.589 son verdes. Para “reforzar la higiene y evitar que haya residuos en la calle”, el Gobierno porteño instaló además 7.000 contenedores antivandálicos, que tienen una tapa con resorte que permite que las bolsas de residuos caigan directamente adentro sin que puedan ser retiradas.
Los contenedores antivandálicos, que se distribuyeron en las zonas con mayores reclamos sobre rotura de basura, también “evitan el derrame de líquidos, dificultan que se metan personas e impiden el depósito de residuos voluminosos que, por su gran tamaño, pueden dañar los contenedores y obstruirlos”.
De acuerdo con lo informado por las autoridades porteñas, en el primer semestre del año fueron vandalizados 25.546 contenedores, un promedio de más de 4.200 por mes. En la mayoría de los casos los contenedores se pudieron reparar con reposición de partes como pedales, tapas o tensores.
En la Ciudad de Buenos Aires, la basura se saca de 19 a 21 de domingo a viernes, para facilitar la recolección y evitar problemas como malos olores y acumulación. Los comercios gastronómicos están obligados a separar la basura y no deben tirar los desechos sin bolsa.
Fuente: Pagina12