El felino presidencial recorrió las redes con su paseo viral en cochecito y escolta, desatando risas, críticas y teorías en todo el mundo.
Un simple paseo puede volverse viral cuando el protagonista es un gato con escolta oficial. Eso ocurrió con Bobby, la mascota del presidente de Indonesia, que recorrió las redes dentro de un cochecito, rodeado de policías. El clip generó todo tipo de opiniones, pero no pasó desapercibido en las redes sociales.
El video desató una ola de comentarios, memes y debates en todo el mundo. ¿Quién es este felino de mirada serena y vida de lujo? ¿Por qué necesita protección oficial? La historia detrás del “primer gato” del país no tiene desperdicio.
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Bobby Kertanegara, el gatito presidencial que se volvió viral en las redes por tener su propia seguridad
Bobby Kertanegara se ganó un lugar de privilegio en la política indonesia. Adoptado por el actual presidente, Prabowo Subianto, este gato dejó de ser un callejero para convertirse en figura central del Palacio Merdeka. Aparece en eventos diplomáticos, posa en reuniones oficiales y hasta viaja con su propio equipo de seguridad.
Su fama explotó tras una aparición en el “Cat Lovers Social Day”, donde llegó sobre una alfombra azul, rodeado de uniformados. La escena quedó registrada en un video que recorrió plataformas como TikTok, Instagram y Twitter, con millones de visualizaciones y reacciones.
Pero el momento más emblemático fue el día de la asunción presidencial de Prabowo. En plena ceremonia, el mandatario interactuó con Bobby, que lo esperaba en un cochecito con sus iniciales bordadas. Esa publicación generó más de 400 mil “me gusta” y reafirmó su estatus de estrella felina.
El animal no sólo es popular en redes sociales, donde acumula casi un millón de seguidores, también fue retratado en exposiciones artísticas y hasta en una pintura oficial publicada por la embajada china. Con tantos honores, Bobby ya no es solo una mascota: es un símbolo de poder y ternura.
La respuesta del Estado de Indonesia tras las críticas en las redes
Ante la controversia por la custodia policial del gato, el gobierno salió al cruce. Juri Ardiantoro, subsecretario de Estado, explicó que si Bobby pertenece al presidente, el Estado tiene la responsabilidad de protegerlo como parte de su patrimonio personal.
La declaración buscó calmar las aguas tras el revuelo generado por el video. Lejos de ser una extravagancia, aseguran que la seguridad del felino se encuadra dentro del protocolo presidencial y responde a su exposición pública.
Fuente: Ambito
