Barcelona recibe a Real Madrid para disputar el clásico, por el partido correspondiente a la trigésima quinta fecha de LaLiga, en un momento determinante para ambos: si los de Hansi Flick ganan, podrían prácticamente sentenciar el campeonato; si lo hacen los de Carlo Ancelotti, la definición quedará al rojo vivo.
El partido, que se llevará a cabo en el Estadio Olímpico Lluís Companys, comenzará a las 16, con el arbitraje de Alejandro Hernández.
El “Barça” llega tras un duro golpe en Champions League, donde fue eliminado en una dramática semifinal frente al Inter de Milán (global de 7-6), pero con buen presente en el torneo local: marcha primero, con cuatro puntos de ventaja sobre su clásico rival y una sola derrota en todo 2025 en competencias domésticas.
En la última fecha, logró una trabajada remontada ante Valladolid por 2-1, con goles de Raphinha y Fermín López. Para este duelo, Flick recupera a Lewandowski y también a Balde y Casadó, aunque estos últimos irían al banco.
El Real Madrid, por su parte, llega con lo justo en defensa. A las bajas ya conocidas de Militao, Carvajal, Alaba y Mendy, se suman las de Camavinga y Rüdiger. Aún así, el conjunto blanco viene de una victoria 3-2 ante Celta, aunque con un cierre sufrido tras ir 3-0 arriba. Ancelotti deberá rearmar la última línea y buscará un golpe estratégico similar al de la final de Copa, donde ya mostró su capacidad para cambiar el rumbo del juego desde el banco.
En esta temporada, el Barcelona logró imponerse en los tres clásicos disputados. Primero, goleó 4-0 en el Bernabéu por Liga, luego se impuso 5-2 en la Supercopa de España en Yeda y finalmente venció 3-2 en la final de la Copa del Rey, con un gol decisivo de Koundé en la prórroga.
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