El entrenador de Boca le sugirió a la dirigencia un cambio significativo de cara a los entrenamientos del plantel profesional.

En una decisión que suena a desesperada, Miguel Ángel Russo le propuso a la dirigencia que el plantel de Boca se entrene durante algunos días en Casa Amarilla, ese lugar histórico que tantas generaciones vieron crecer y que está en el corazón del barrio, al lado de la Bombonera.
El objetivo es que los jugadores sienta de cerca la realidad del hincha, la del que vive el día a día del club y se enfoquen más en los objetivos. El “Xeneize” necesita revertir de forma urgente la mala actualidad que vive, con 11 partidos seguidos sin triunfos.
El Boca Predio de Ezeiza es espectacular, moderno y profesional, pero también inaccesible para el hincha y hace que los jugadores no sientan esa calidez.
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AMBITO