Estudiantes igualó 0-0 este lunes como local ante Tigre, en la continuidad de la penúltima fecha de la Liga Profesional, que por ahora deja séptimos a los platenses en la Zona A.
De entrada, el conjunto de Eduardo Domínguez –apremiado por sumar de a tres para intentar sellar el pase a octavos de final- salió con todo e inclinó la cancha ante un desdibujado Tigre, ya clasificado.
Pero al local le faltaba justeza y la más clara fue sobre el cuarto de hora, cuando a Palacios le llegó un envío desde la derecha que tomó a contrapierna a la última línea visitante y, de frente al arco, la quiso colocar, pero Zenobio tuvo una brillante reacción y le ahogó el grito.
El conjunto de Diego Dabove logró equilibrar el control a la media hora de juego, ya no se sintió tan acosado por su anfitrión y comenzaba a llevar algo de peligro a partir de algunos arrestos de Saralegui (ex volante de Boca) y la presencia siempre peligrosa de su goleador Ignacio Russo, el hijo del entrenador de San Lorenzo.
Del lado de un impreciso Pincha, ausente Farías en el armado, Tobio Burgo y Alario no tenían mayor incidencia en ofensiva, entre otras cosas porque no les llegaba mucho juego, por lo que la defensa de Tigre -más allá de algunos desajustes- se fue al descanso sin mayores sobresaltos, a excepción de la lesión de Banegas, que salió muy dolorido del campo reemplazado por Sebastián Sosa.
En la segunda parte, el lateral Meza seguía tomando la lanza desde su andarivel, en la esperanza de sacar un centro que sea fructífero. Entonces en una jugada Alario arrastró marcas y eso facilitó la aparición por sorpresa de Farías, quien sacó un derechazo que sacudió un poste.
Conforme pasaban los minutos, Estudiantes no dejaba de empujar, pero Tigre, pese a su evidente repliegue, llegó con peligro de la mano de Saralegui. Luego lo tuvo Carrillo, pero le pifió groseramente al balón.
El final fue con algunos silbidos para los de Domínguez, que deberán definir su boleto en la última fecha en La Paternal y ante Argentinos Juniors, ya clasificado.
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