Newell’s y Argentinos protagonizaron un 0-0 mentiroso que los dejó a los dos con gusto a poco, más allá de que cada uno con su fórmula hizo méritos para conseguir algo más. Desde los números tampoco quedaron satisfechos: los rosarinos no pudieron ponerse en puestos de clasificación, mientras que lo de La Paternal dejaron pasar la chance de quedar como únicos punteros de su zona y asegurar su boleto en los octavos de final.
El encuentro tuvo un trámite entretenido, con un desarrollo muy claro entre dos propuestas bien distintas. Argentinos, partiendo desde la tenencia de la pelota, buscó asociaciones ofensivas para generar peligro. Y si bien lo hizo de manera más que aceptable hasta tres cuartos de campo, le faltó precisión en el último toque. Por eso, sus llegadas frente al arco de Navas quedaron muy limitadas en relación a la cantidad de tiempo que tuvo la pelota. Una aparición de Alan Rodríguez que se desvió en Lollo antes de salir al corner fue la llegada más clara de esa primera parte.
Del otro lado, Newell’s se despreocupó de la pelota. Dejó hacer a Argentinos, pero en zonas de la cancha donde sentía que no podían lastimarlo. Y cuando recuperaba en lugares propicios, aprovechaba los espacios y atacaba con decisión y profundidad. Con Banega como lanzador, con Cocoliso Rodríguez de pivot y con Silvetti, Maroni y Herrera como corredores se las ingenió para contar con las chances más claras. Pero entre las manos del Ruso Rodríguez y la imprecisión al momento de definir de Silvetti y, sobre todo, Maroni se escaparon las posibilidades de abrir el marcador.
La intensidad que le pusieron a ese primer tiempo dejó su marca en los dos equipos, que siguieron en la búsqueda del gol con sus maneras, aunque con menos energía. En ese contexto, Argentinos lució más peligroso: un cabezazo de Herrera y un remate de Godoy provocaron dos atajadas gigantes de Navas. Agotado por el desgaste, Newell’s se replegó y aguantó para sostener un empate por el que peleó mucho.
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