El icónico vampiro regresa a la pantalla grande en una producción que mezcla romance, fantasía y acción.

Las gran cantidad de adaptaciones de Drácula de los últimos tiempos demuestran que el mito sigue siendo un terreno fértil para la exploración cinematográfica. Desde la epopeya romántica de Francis Ford Coppola de 1992 hasta la reciente Nosferatu de Robert Eggers, y tantas otras más, demuestran que cada versión ofrece (o al menos lo intenta) una perspectiva única sobre la inmortalidad, la soledad, el mal y el anhelo.
Este jueves llega a los cines Drácula, o en su titulo original Dracula: A Love Tale, un titulo que traducido ya nos dice todo: “Una historia de amor”. La nueva cinta de Luc Besson, el director francés de El perfecto asesino, El quinto elemento o la más reciente Dogman se olvida de todo el horror presente en la historia creada por Bram Stoker y el resultado es un tanto irregular.
Cómo es la versión de Drácula de Luc Besson
La sinopsis oficial de Drácula indica que la película “reinterpreta el mito del vampiro a través de una narrativa profundamente emocional, donde el amor trasciende el tiempo y la muerte. La historia sigue a un príncipe del siglo XV que, tras perder a su esposa, desafía a Dios y se transforma en vampiro. Siglos después, en el Londres del siglo XIX, encuentra a una mujer que parece ser el reflejo de su amada perdida, iniciando una persecución que sellará su destino”.
“Todo comenzó porque Caleb Landry Jones (Drácula en la película) y yo queríamos volver a trabajar juntos. Un día, en el rodaje de ‘Dogman’, le pregunté qué le gustaría hacer después. Hablamos de las grandes figuras clásicas, en particular de los personajes monstruosos, y surgió el entusiasmo compartido por Drácula. Volví a leer la novela, lo que reforzó mi deseo de embarcarme en este proyecto”, indicó Besson en un comunicado.
La historia es básicamente la que ya hemos visto en tantas otras adaptaciones. Muchas partes de la trama se dan por sentadas (¿o son agujeros de guion?), en este caso cómo ya se dijo “el amor” es el motor principal y a veces el deus ex machina de la historia. El horror queda reducido a lo mínimo e indispensable, hay más espacio para la acción, la fantasía y hasta algunos toques de humor.
Landry Jones cómo el mítico vampiro, Christoph Waltz como un sacerdote con tintes de Van Helsing y Zoë Bleu (en su doble papel de Elisabeta y Mina) se lucen en sus papeles y hacen que todo sea más llevadero.
Drácula (Dracula: A Love Tale) llega a los cines el jueves 14 de agosto. Director: Luc Besson. Reparto: Christoph Waltz, Caleb Landry Jones, Matilda De Angelis. Basada en: la novela Drácula de Bram Stoker
Fuente: Ambito