Los tres récords mundiales de la canadiense Summer McIntosh durante los clasificatorios de su país fueron lo más importante, hasta ahora, de un año que tendrá su punto más alto en el Campeonato Mundial de Natación en Singapur, durante el mes próximo.
La joven estrella de Canadá tiene extremidades largas y flexibles, una gran flotabilidad y ha trabajado en su técnica hasta el punto que da la sensación de nadar con comodidad, aún en pruebas tan difíciles como los 200 mariposa y los 400 combinados.
Por primera vez en 15 años, la estadounidense Katie Ledecky encontrará dos grandes escollos para reafirmar su condición de mejor nadadora del planeta. En primer término se trata de su compañera de equipo, la extraordinaria velocista Gretchen Walsh, quien ya es la favorita para ganar cuatro pruebas individuales, los 50 y 100 libres y los 50 y 100 mariposa, además de que podría sumar los relevos por equipo.
La otra contendiente de la fondista Ledecky, y rival directa en la prueba de 800 libres, será la nombrada McIntosh, que a los 18 años ya es la nadadora más versátil del mundo, dominando con amplitud las pruebas de 200 y 400 medley.
A esas dos pruebas en las que posee el récord mundial, la joven canadiense puede agregar los 200 mariposa, los 400 libres amenazando el reinado de la australiana Ariarne Titmus, y hasta los 800 libres, en los que tiene la segunda mejor marca de todos los tiempos sólo por detrás de la formidable Ledecky.
Si bien se trata de cinco pruebas muy duras, a las que se deben sumar los relevos y las eliminatorias, la canadiense parece no temer al cansancio por acumularse en Singapur. Ella cambió desde enero al coach Brent Arckey, para entrenar en Europa durante los últimos meses en Antibes, con quien fuera el técnico de la estrella española Mireia Belmonte, el francés Fred Vergnoux, cuya dureza en los entrenamientos es ampliamente conocida.
La canadiense reconoció públicamente que necesitaba un cambio en su rutina diaria, y que se sintió muy motivada durante la temporada europea. Sin embargo, para la puesta a punto final, McIntosh también habrá de consultar con el prestigioso entrenador estadounidense Bob Bowman, quien fuera el hacedor de Michael Phelps y que hoy entrena al nadador más completo de la actualidad: el francés León Marchand.
Summer explicó que Bowman será su próximo técnico desde agosto en Austin, Texas. A sus dotes extraordinarias como nadadora, la joven de 18 años y sus conductores, agregan la inteligencia y el tino de contar con dos de los mejores especialistas disponibles en esas pruebas.
Una decisión de cambios radicales, en busca de la excelencia, que quizás puede sorprender particularmente, ya que se trata de una campeona olímpica y que en la natación menos profesional, como por ejemplo la nuestra, es bastante infrecuente. Es allí en donde el técnico a veces puede trasmitir la frase: “Hay que morir con la nuestra”.
La expresión es muy mediocre, aunque por cierto, muy difundida en el deporte de poco vuelo, en el que lamentablemente la consulta o el aprendizaje suenan a sinónimo de debilidad.
* Ex Director Nacional de Deportes.