¿Tenés cordones viejos guardados? Con estas ideas fáciles los podés usar para decorar tu casa


Podes darle un nuevo uso a esos objetos olvidados y convertirlos en decoraciones prácticas, divertidas y originales.

La verdad es que si abrís algún cajón seguro encontrás un par de cordones sin uso, desparejos o que ya no combinan con nada. Pero antes de tirarlos, pensá primero que si usas tu creatividad, podés transformarlos en adornos divinos para tu hogar y, de paso, sumar tu granito de arena al cuidado del ambiente.

Reciclar no siempre tiene que implicar grandes cambios. A veces, se trata de encontrarle un nuevo propósito a las cosas que ya tenemos en casa. En este caso, los cordones son los que se convierten en una opción económica y ecológica para decorar y organizar tus espacios.

¿Por qué los cordones no pueden mantenerse atados?

Cordones viejos: todo lo que podés hacer con ellos

Los cordones de zapatillas, zapatos o mochilas están hechos con materiales como algodón, nylon o poliéster, lo que los hace duraderos y bastante resistentes. Esto los convierte en una excelente materia prima para armar desde accesorios hasta elementos útiles para el día a día.

Para empezar, solo necesitás juntar algunos cordones que ya no uses, un poco de pegamento, tijeras y, si querés hacer algo más elaborado, también aguja e hilo. Con eso podés hacer, por ejemplo, un llavero personalizado, pulseras trenzadas, un cinturón, o incluso una correa para tu mascota.

Si te va más lo artístico, podés usarlos para hacer cuadros decorativos, simplemente tenés que enrollarlos y pegarlos sobre una base o marco. El resultado puede ser abstracto o con formas específicas, como mandalas o letras.

En el jardín también tienen su lugar. Al ser resistentes a la humedad y al sol, los cordones pueden servir para atar plantas, sostener ramas o como guía para enredaderas. Son reutilizables, fáciles de adaptar y mucho más duraderos que otros materiales descartables.

Otra idea es armar colgantes, anillos o pequeños adornos que podés usar como souvenirs o regalos. Si tenés chicos en casa, es una buena excusa para enseñarles sobre reciclaje y que participen en una actividad divertida y didáctica.


Fuente: Ambito