Un narco brasileño detenido en Caballito | Estaba condenado y se fugó en Brasil y cayó por llamar un Uber 



El brasileño Fabio Rosa Carvalho, sobre quien pesaba un pedido de captura internacional tras fugarse de su país –luego de ser condenado como jefe de una banda criminal– fue detenido en Buenos Aires, en un operativo conjunto de fuerzas de seguridad de Argentina y Brasi. Carvalho, de 41 años, fue arrestado en la noche del viernes en el barrio de Caballito en un procedimiento del que participaron efectivos de la policía porteña, de la provincia argentina de Córdoba y del estado brasileño de Río Grande do Sul con ramificaciones en Uruguay.

Según informaron fuentes oficiales, sobre Rosa Carvalho pesaba una orden de captura internacional librada en 2023 por Interpol luego de que se fugara de una cárcel de Brasil, donde cumplía una condena como jefe de la banda Os Manos. La banda fue hallada responsable de unos 150 homicidios cometidos en 2009, además de comercializar drogas y tener vínculos con la organización criminal brasileña Primer Comando de la Capital (PCC). Opera en el estado de Río Grande do Sul y tendría unos 10.000 miembros.

La Policía Civil del estado de Río Grande do Sul sospechaba que Rosa Carvalho podía estar en Córdoba y se contactó con la división de Investigaciones Criminales de la Policía de esta provincia argentina. A raíz de tareas de seguimiento se determinó que el brasileño podría estar en la ciudad de Buenos Aires, por lo que la policía capitalina se incorporó a la investigación.

“En los últimos días viajó una comisión de personal de la Dirección General de Investigaciones Criminales de la Policía de Córdoba y de la Policía Civil de Río Grande do Sul e iniciaron tareas de inteligencia que terminaron en la detención de este delincuente”.

La captura se concretó a las 19.45 horas en avenida Pedro Goyena al 800, en el barrio porteño de Caballito, luego de varias jornadas de tareas de inteligencia.

La circular roja de Interpol lo describe así: “Atención: armado, peligroso, propenso a la evasión, violento”. Trascendió que cayó por pagar un Uber con tarjeta de crédito. Había entrado a la Argentina con el nombre falso de Gilmar Dos Santos –con este nombre tenía una tarjeta de crédito– y lo conocían como “Noia”, que en Brasil significa algo así como “loco” o “drogón”. En su caída influyó un error muy común en la mafia: tener tatuajes. En este caso eran las frases “God is love” con una cruz en el cuello y la palabra “Faith” en el lado opuesto, y un dragón en el brazo derecho.

De Córdoba a Buenos Aires

Primero lo habían ubicado –digitalmente— en Córdoba, y después se descubrió que estaba haciendo compras en la ciudad de Buenos Aires. La tarjeta de crédito permitió deducir que estaba usando la aplicación Uber para moverse por la ciudad. Cuando lo atraparon vestía como un hincha de Boca Juniors.

Estaba condenado por narcotráfico a 16 años y 10 meses de prisión y ya había recibido la libertad condicional con tobillera electrónica. Pero se escapó hacia Bolivia y luego Argentina. 

Participaron en el caso el Juzgado Nacional en lo Penal de Rogatorias, a cargo interino de Alejandro Adrián Litvack, la Fiscalía de Instrucción Distrito IV del doctor Juan Pablo Klinger y el Juzgado Criminal y Correccional Federal N°9, de la doctora Paula Sanz.

Fuente: Pagina12